Hojeando los libros de la saga Crepúsculo, como hago cada vez que tengo un ratillo libre, encontré una frase curiosa, una frase que hizo que me replanteara el amor en los vampiros, no sé las palabras textuales (perdí la página y no la he vuelto a encontrar) pero sí se el contenido, la frase venía a decir que los vampiros se enamoran de manera más fuerte que los humanos. Es decir, que los vampiros también "impriman".
Cuando tratamos el tema de la imprimación, mejor dicho, cuando lo trata Stephenie, que es la que más sabe, se nos dice que es una condición que ni se elige, ni se fuerza, ni se elude, ni se acaba. Un hombre lobo adulto puede imprimar una niña de dos años, como en el caso que nos presentan en Amanecer, y, una vez se ha producido la imprimación, el hombre lobo no se arrepiente jamás de haber elegido a esa niña, la amará siempre, incluso si no es correspondido, dará la vida por ella si es necesario, sólo pensará en su bien, incluso si su bien es estar lejos de él... Stephenie Meyer nos presenta un amor platónico, especial, único, perfecto.
Un amor que sólo puede igualarse al de los vampiros. Los vampiros no impriman, ya que la acción de quedarse profundamente enamorado de una desconocida de cualquier edad y condición en un segundo está reservada a la raza de los licántropos, pero sí se enamoran fuertemente.
Pongamos un ejemplo del amor de los vampiros: Victoria. A Victoria le arrebatan a James y no duda en crear una venganza de lo más atroz (quizás no es el mejor ejemplo). Otro ejemplo: Edward. A lo largo de todos los libros de Crepúsculo se nos habla del amor incondicional de Edward y se nos recalca su intensidad.
Stephenie Meyer quiso crear dos razas en las que poder plasmar un amor tan perfecto que muchas personas no llegan nunca a sentir. Si lo vamos a ver de cerca, los vampiros los hemos creado los humanos a nuestra imagen y semejanza, solo que máshermosos, más fuertes... mejores, a fin de cuentas. La posibilidad de la imprimación o el enamoramiento vampírico son un rasgo más de perfección que quiere alejar a los vampiros de los humanos. Porque cuanto más humanos sean los vampiros, menos perfectos.
Así que, lo dicho, los vampiros también "impriman" a su manera.
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